estoy siendo prisionera de unas palabras que me ataron.
como si una maldición apretara todas las cuerdas de mi cuerpo de bajo.
sin sonar tomo la tensión
y me amarro al mástil de mis recuerdos en este mar interno.
a la deriva de sensaciones.
hechizada por una sirena, a la cual no se le distingue ni el pelo.
se que es una sombra ilusoria.
no tengo ni idea de si encallara mi bajo, en el badajo del yugo de sus garganta.
y me arrastran dragones con cuerdas para que no caiga por el precipicio.
cascadas de veneno al pozo mas ciego.
Mis aventura no recuerdo. Sosiegan los vientos en el flequillo de mi cuerpo.
Vibro con la aventura de la deriva, solo necesito mar.
¡Duele amor! ¿qué musa traiciono tus palabras?
ahora ya no recuerdo tu mirada, tus ojos temblando.
cántame otra canción mas alegre si esta deriva me arrastra hacia las tierras de entierro
di, solo una palabra. El silencio de la sirena.
Cariño ¡Cariño!
no te rindas yo voy a cuidar de ti
volare, amarrarme el corazón y que la cometa atraviese mi pecho.
dame las alas del firmamento.
mientras caigo impedida y amarrada por recuerdos.
volaban los besos de contentos que se pusieron al oler tu cara
tu alma de fuego.
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